Se tuvieron en cuenta dos premisas fundamentalmente: la tienda es una prolongación del pavimento de la calle Trapería de Murcia, para así incitar al comprador a una compra inmediata y la asociación que tiene el tiempo con la palabra “AHORA”, ya lo decía Ernest Hemingway: “Ahora: una palabra curiosa para expresar todo un mundo y toda una vida”. La Lectura del símbolo creado, se hace en el mismo sentido que las agujas del reloj, repitíendose la “A” igual que lo hacen las “12”, pueden ser las doce del medidía o de la noche.